Todos quieren estar en una relación, pero no todo mundo está listo para una relación plena.
Hay una gran diferencia entre querer una relación y estar listo emocionalmente para una.
No estar listo significa entrar a una relación por las razones equivocadas y acaba siendo una relación dañina y complicada.
1.Todavía no superas a tu ex
No tiene nada que ver con cuánto tiempo ha transcurrido antes de iniciar una nueva relación.
El tiempo es irrelevante.
Lo importante realmente es haber acomodado las emociones y haber aprendido.
Si aún hay mucho peso emocional, aún no es momento.
2. Tu enfoque está en ti y otros aspectos de tu vida
Tal vez estás muy ocupado con trabajo, escuela u otro proyecto.
Tenemos que entrar a una relación con la idea de dar, no de recibir. ¿Eres capaz de darle tiempo, atención y energía a otra persona?
3. No puedes hacer compromisos y cambios por otra persona
¿Tienes disposición a hacer cambios y compromisos por una pareja?
Una relación es exitosa sólo cuando ambas partes están dispuestas a mirar más allá de sí mismos y ven las necesidades y requerimientos de la otra persona.
4. No ves futuro con la persona
Si sientes que no es la persona indicada, es mejor no perder el tiempo.
Si crees que sólo es “por ahora”, es probable que estés eligiendo desde necesidades y no por la persona.
Hay que estar con alguien con quien puedas comprometerte al 100% y sabes que podrás elegir en el futuro.
5. No estás bien por tu cuenta
No puedes esperar que la otra persona sea la que te haga feliz o te resuelva otras áreas de tu vida como el aspecto social o financiero.
Si hay varias áreas de tu vida que no están bien, hay que cuestionar si estamos entrando a la relación por cubrir esas necesidades.
Idealmente, eliges a alguien estando bien por tu cuenta y estando cómodo con tu soltería.
6. Quieres una relación que te salve de ti mismo
Si tu no te sientes bien contigo mismo o completo con tu vida, no puedes querer una relación porque te hará bien o porque arreglará tu vida.
Entrar desde ese espacio crea dependencia, expectativas y dinámicas que no son sanas. En donde la pareja se convierte en tu amante, sistema de soporte, figura paterna, etc…
7. No estás dispuesto a cambiar o crecer.
Si la culpa de las relaciones pasadas siempre es de la otra persona o si no estás dispuesto a reconocer o aceptar defectos, a cambiar o a tomar responsabilidad, tal vez no estás listo para una relación plena.
El conflicto en una relación es inevitable. Todos tenemos defectos y errores. Poder reconocerlo y estar dispuestos a mejorar es básico para una relación plena.
Si quieres comprobar si tu cita y tu están listos para una relación.
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